Descubrir nuestros talentos.
“Descubrir nuestros talentos:
28 de noviembre de 2014
La cultura emprendedora está
ligada a la iniciativa y a la acción. Tener la cultura emprendedora como
filosofía de vida nos ayudará a lanzar nuevos proyectos propios con autonomía,
desplegando nuestro amplio abanico de destrezas personales y fundamentalmente,
poniendo en juego nuestra capacidad de asumir riesgos desde la responsabilidad
personal.
La proyección de nuestras
ideas al exterior tienen como objetivo reaccionar y resolver los retos que un
emprendedor/a tiene ante sus pies. Pero esto es solo lo que se ve desde fuera.
La
cultura emprendedora necesita de un
trabajo personal propio manejando dinámicas herramientas, dotándonos de un
contundente realismo con dosis de optimismo. Pero para ello, debemos descubrir
nuestro potencial y nuestras competencias en lo personal y profesional para dar
respuestas a nuestras inquietudes. Primordialmente, a aquellas que tienen que
ver con nuestro empleo. Por tanto, se hace necesario dar pasos en la dirección que nos lleva nuestra intuición cuando tratamos de “descubrir nuestros
talentos: nuestro proyecto, nuestro
futuro, nuestro empleo”
En ese camino, aquellas y
aquellos que viven la cultura emprendedora desde sus inquietudes personales
para solventar y dar comienzo a sus ideas de negocio o empleo, intentan dar
respuesta a los siguientes interrogantes:
ü ¿Cuál es mi idea o proyecto?
ü ¿Cómo puedo llevarla a cabo?
ü ¿Qué me hace falta para montar una empresa?
ü ¿Cómo elaborar un plan de empresa?
ü ¿Las formas jurídicas más apropiadas?
ü ¿Existen ayudas a la financiación?
ü ¿Qué tipo de subvenciones?
Estas suelen ser las cuestiones a las que de manera
sistemática se da respuesta desde lo más técnico. Pero existe algo que subyace en la base de
esas cuestiones, la idea que fundamente nuestros primeros pasos y nuestros impulsos por generar esa idea final. Los
pasos de partida en su estructura técnica se centrarán en dar sentido al siguiente esquema:
Sin embargo, al verlo así,
nos podríamos llevar a engaño. Toda idea, surgida del trabajo, del
conocimiento específico del entorno, de la creencia y fundamentación de la idea tiene un esfuerzo previo al que
debemos presentar atención. Cualquier emprendedor/a debe fundamentar sus fortalezas pues, éstas vienen
definidas en su pensamiento, su actitud y
su acción de emprender.
[i]Trabajo realizado
en el taller de Acercamiento al
Autoempleo y la Empresa en mayo de 2014 dentro de las I Jornadas de Motivación y Emprendeduría organizada por el Área de Bienestar Social,
Calidad de Vida y Solidaridad a través de la Concejalía de Educación del
Ilustre. Ayuntamiento de San Bartolomé de Tirajana y el CEPA San Bartolomé de Tirajana..
