Los asuntos pendientes no se demoran.
“ Los
asuntos pendientes”
28 de
agosto 2014
El “verano” está tocando a su “fin”.
Esto significa la llegada de un nuevo periodo. En ese nuevo periodo unos
estarán pensando en cómo afrontar los nuevos horarios, el cambio de hábitos
veraniegos, volver a ajustarnos a la rutina laboral y escolar. Sin duda este
nuevo inicio de curso escolar supone para las familias todo un revulsivo pero,
a su vez, una vuelta a la rutinas tan importantes que van dando sentido a
nuestras vidas.
El merecido
descanso de unos y otros también tiene que ser valorado en su justa medida. Y
ahora toca, dar inicio a la nueva etapa. Sin embargo, hay algunos estudiantes
que por varios motivos saben que el verano también ha estado acompañado de un
trabajo “extra” pues para ellos el curso no terminó en
junio. Saben que septiembre les está esperando para resolver “asuntos pendientes”. Así deben verlo.
Los asuntos pendientes no van a desparecer porque sea verano,
otoño, invierno o primavera. Los asuntos
pendientes siempre reclaman
su momento de atención. Para estos alumnos/as septiembre les recuerda, en su
primera semana, que deben acudir a su centro a solucionar y superar algunas
pruebas que se han quedado como eso, “asuntos pendientes”.
“Las
familias” de esos alumnos/as saben que son “un
equipo”. En ese empeño por solucionar los asuntos pendientes las familias juegan un papel
fundamental. Saben que solo hay una forma de darles carpetazo o salida y es
afrontándolos. En ese trabajo las familias han ido apoyando a sus hijos/as a
enfocar el camino hacia septiembre. Desde que finalizó el curso en junio, han
tenido presente la fecha de septiembre. Han ido trabajando la “responsabilidad” en su hijo/a de cara a la solución
para afrontar ese asunto
pendiente. Pues es ahora, en esta recta final de agosto, antes de la
llegada de septiembre donde al igual que un corredor entrena todo el año para
las competiciones finales, se hace necesario cumplir con ese momento de “preparación” previa a las pruebas.
En ese sentido, hay
que empezar a trabajar los “horarios” de máximo rendimiento. Sabemos que no
es llegar el día de las pruebas y ya está todo resuelto. Sabemos que ha habido
un trabajo previo donde nos hemos ido “aclimatando” según los tiempos de calor.
Ahora llega el momento de aclimatarse “para la carrera”. Sabemos
que tenemos fechas y horas concretas para “enfrentar las pruebas”.
Ya no podemos trasnochar.
En estos últimos
días debemos entrenar nuestro “cuerpo y mente” para ese momento. Sabemos que
tenemos que estar “frescos” y
en las “mejores condiciones”. Sabemos que tenemos que estar “desayunados” para que nuestro cerebro pueda
funcionar al 100% pero también para que nuestro cuerpo mantenga la tensión
necesario con la que afrontar la prueba o pruebas de ese o esos días.
Sabemos que tenemos que visualizar el escenario para “lograr el
objetivo superando los asuntos pendientes.”
A todos/as ánimo y
suerte en esa carrera de septiembre.